Un pueblo esconde muchas historias. Muchas vidas pasadas, y también muchas actuales que no se ven. Que permanecen en el limbo sin que sus propios habitantes se den cuenta de que forman parte de una historia actual, y a veces oscura por lo oculta o por lo poco evidente ante la evidencia total. Pasaron tres días antes de recibir el segundo paquete. Este tenía un color amarillo más pálido, como si se hubiese humedecido y secado al sol. Menos abultado quizá y por el tacto mas que papeles contenía unos pedazos duros, piezas sueltas de algo que en su totalidad no parecía configurar nada. Le abrió y entonces vio la empuñadura del bastón, de metal, cobre quizá, con la forma de cabeza de un perro de caza. La madera que soportaba la empuñadura estaba truncada, con un corte reciente hecho aparentemente a mano, o al menos sin usar ninguna herramienta de cortar. Además, tres plumas de pavo real llenas de motas de polvo, un espejo de mano, al cual se le estropeaba el azogu...
Comentarios
Pue no sé, no sé....
No sabría yo muy bien que decir, porque los municipales de por aquí, con su look de gorra de plato y gafas de espejo siempre me dieron un toque a los "Village People". Sí.
Un beso
Por supuesto que si.
Saludos.
Ahora toda esta gente jóven de las F.O.P. con tanta gimnasia, uniforme de diseño....eso
:D
músculos,se ven que están en forma;menos mal que el de la derecha sonríe porque si no¡qué miedo!.Abrazo.
;-)
Espero que hayas pasado buen fin de semana.
Un abrazo.
:D
La foto la hice en la manifestación del Orgullo Gay en Madrid en el 2007. La verdad es que parecían parte de la mani (no por ellos sino por la cantidad de tíos disfrazados de poli)...quizá fuese porque se veían tan machos que parecían gays. Pero bueno, no es mas que un estereotipo... y eso ya se sabe.
¿Estarían orgullosos de poner el orden en un sitio tan desordenado?
Besotes