Rescatado de la Quema 3. Viejas Historias.
El hombre atrapado


El hombre como concepto, mas allá de cualquier sexo.

Tienes una vida, dos vidas incluso.

Y siempre estará atrapado, por la costumbre, el trabajo, los deberes, los afectos.
Proyecto de hombre a medida, aunque la mayor parte de las veces nos vamos haciendo a pedazos de aquí y de allá. Componiendo circunstancias.

En un intento desesperado por salir, cree abrir ventanas en tareas que cree necesitar. Se apunta al gimnasio, da clases de inglés, participa en una charla de ex compañeros.

Falsas ventanas que se abren dentro de la jaula, donde de alguna forma el yo se desborda, bajo la mirada atenta de alguien que siempre nos observa, nos juzga y espera algo de nosotros.

El hombre atrapado familia. Con tantos seres queridos alrededor. Pequeños seres incluso que dependen de él. Una pareja atenta a sus necesidades, a brindarle todo su yo a cambio de todo su él.

Proyecto de vida que espera algún un día vivir su vida.

El hombre atrapado su vida. Con toda la supuesta y libre elección de cómo quiso vivir.
Hombre atrapado por afectos, por los años de compañía. Aún así atrapado hasta por su propia ansia de libertad.

Hay ventanas para los hombres atrapados.

La ventana es la que le da alguien que no espera nada ya. Que está tan atrapado como él y sólo quiere esa ventana hacia un sitio donde no se pide nada mas que estar con alguien que es el reflejo de uno mismo. El hombre ante el espejo.

Comentarios

Tacirupeca Jarro ha dicho que…
Todavía soy muy joven como para hacer sentencias dogmáticas sobre la vida, pero me doy cuenta de que el ser humano llega a ser en ocasiones tan estúpidamente complejo...

Nacemos en la simplicidad. Y con el tiempo, empezamos a ponernos etiquetas, fachadas, nos creemos unos roles inventados... y luego nos pasamos el resto de nuestra vida luchando contra esas etiquetas fachadas y roles, intentando deconstruirnos a nosotros mismos. Todo esto, a costa de un esfuerzo mental sobrehumano.

Me rindo ante esa gente sencilla (como el del cartel del fotógrafo Daniel Pérez que tienes en tu blog). Sucumbo ante esa ligereza que da sencillez.

Un abrazo, Alberto.
Fatima ha dicho que…
¿No será que cuando una persona es consciente de que es un ser "atrapado" deja de serlo?

Brindo por la sencillez que describe Magnolia. ¿Y si después de todo resulta que la existencia es mucho más simple, pero mucho, muchísimo más? Nada de buscar reflejos... sólo jugar al dominó, mirar por la ventana, ver crecer a tus hijos o a los hijos de tu vecino....dejar pasar la vida sin quererle dar más valor que el que tiene una vida :) (aunque sea la tuya).

Un abrazo.
ZoePé ha dicho que…
Lo que no entiendo desde hace días es por qué estas reflexiones iban a ser quemadas.
Ando medio seca para escribir, pero leo, eh?
Beso.
Juncal ha dicho que…
" Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos."
BORDEAUX, Henri

Espejos rotos...porque los continuos movimientos que hacemos por no sentirnos atrapados, ese vaivén incesante de abrir ventanas, podría llegar a distorsionarnos de tal forma
que no podríamos ni reconocernos ante un espejo.

Por eso...si,
hay ventanas para los hombres atrapados, pero como dijo F.Sagan sólo cerrando las puertas detrás de uno se abren ventanas hacia el porvenir.

Abrazos
Juncal.
Nacho ha dicho que…
¿ Dos vidas ?

¿ La que la sociedad impone y la que uno desea vivir ?

Hay poco tiempo y pasa rápido, cuando quieras vivir tu vida ¿ qué encuentras ?

¿ Soledad ? El hombre ante al espejo.

No le des más vueltas, vive día a día y disfruta de esta vida, la que te ha tocado vivir, por muchos años que vivas, es corta.

Últimamente nos complicamos bastante nuestra existencia, creo que Magnolia y Fatima aciertan con lo de sencillez.
Alberto ha dicho que…
En general no creo que la vida sea tan simple como alguno de vosotros la véis, otra cosa es que sólo tratando de simplificarla se pueda sacar mejor provecho de ella.
Cuando escribí esto, lo hice observando la vida de varias personas, atrapadas por su propia vida, en algunos casos con posibilidades de cambiarla, en otros no. No es mi caso para los que os habéis preocupado por mi (gracias), por suerte he cambiado mi vida mas de una vez cuando era necesario y afortunadamente siempre ha resultado para bien.
Pero insisto que no es fácil ni simple, cuando no sólo tienes que cambiar tu cabeza, sino tu entorno, tu país, etc.
A veces olvidamos las obligaciones que también tenemos (los padres, hijos a cargo de los padres, etc) que a veces no permiten cambiarlo todo.
He pensado que sería interesante contar de la vida de alguna gente que cambió el nombre, se mudó de país e hizo una vida totalmente diferente. Sería el contraejemplo de esta entrada.
Un abrazo
Alberto ha dicho que…
Una últia anotación:
Cuando el hombre descubre que sólo en ese cambio le puede acompañar alguien, descubre que está frente al espejo. Sólo uno mismo puede cambiar su propia existencia.
Un abrazo again
JOAKO ha dicho que…
El otro día me vi sin querer en un espejo y por primera vez me vi más viejo...

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