Las Vegas, viaje a ninguna parte


Hago este post para desmitificar una opinión propia, o mas que eso, es una impresión de mi visita a Las Vegas. En realidad no hay nada extraordinario en mi visita allí, ni tampoco hay nada en mi impresión que pueda herir susceptibilidades. Tendré que escoger algo las palabras (esa eterna fuente de malentendidos) o pensar si en realidad soy objetivo cuando me digo que me puede parecer una ciudad para gente inculta. Ahi va la primera... Pero inmediatamente me viene a la mente mis tíos, en específico una tía que no es nada inculta y a la que las Vegas le parece
"fenomenal". Sinplan se ha puesto en evidencia (me parece bien) con una declaración de que le gusta "Las Vegas". Sinplan es para mí es de los tíos mas brillantes que he conocido y no hay sospechas de que pueda ser un tipo especialmente inculto. La mujer de un primo directo, que es norteamericana y que me cae especialmente bien con su conducta desenfadada que me recuerda las conductas latinas, pero que va mucho mas allá con una sutileza de diversión ante casi cualquier cosa en la vida me ha dicho " Vegas (muchos norteamericanos sólo le llaman así, Vegas) is FUN!"
Bueno, con todas esas opiniones que para mí tienen algún peso, llegué a Las Vegas proveniente de la ciudad de San Francisco donde tenía 6 grados de temperatura, a esa mítica ciudad donde el termómetro marcaba los 45 C (110 F).La ola de calor desértico abofeteaba la cara y ya desde el aire se podía preveer que aquél oasis en medio del desierto de Nevada tenía que ser un sitio al menos caliente y alterado.
La eficiencia con que te traslada un autobús a tu reservado hotel o a la agencia donde has alquilado el coche es asombrosa. Para mi asombro las máquinas tragaperras están hasta en la puerta de salida de los vuelos. En pocos minutos entrábamos en la ciudad con el coche alquilado, por una autopista que la rodea y que te permite observar el perfil de los altos edificios que resultan ser los hoteles. Casi todos ellos temáticos: una pirámide, un edificio Veneciano, un anuncio inmenso de la MGM. La primera impresión es la de estar en un parque de atracciones gigantesco. Aún no se aprecian los detalles de lo "hortera" (traduzcámoslo como "lo de mal gusto". Para eso hay que acercarse un poco mas a las fuentes con estatuas romanas hechas con una mezcla de hormigón y fibra de cristal (no, no son de piedra ni de mármol). Algunas palmeras gigantescas daban la bienvenida en la entrada de mi hotel, el Treasure Island. Una fantasía de Corsarios y Piratas. Una larga cola para registrarse en el hotel, a pesar de los 6 empleados que tenían para el registro. Y es que la masividad de las Vegas hace que los hoteles y la calle se conviertan en la manifestación mas socialista de público popular (valga la redundancia), un ejemplo de la mass media norteamericana. Este comentario resulta casi elitista. Lo reconozco, pero me era inevitable constatar desde la familia media norteamericana hasta esa parte del pueblo que en su aspecto puede rayar en lo periférico de las ciudades, en la cultura de Belén Esteban como representativo de lo mas popular. Lo mismo me ocurre en IKEA de San Sebastián de los Reyes en Madrid cuando escucho la discusión de un matrimonio con dos niños pequeños que corretean por allí.
No hay nada malo, o feo o vulgar en las grandes masas. Yo también y todos somos representativos de ella, porque como su nombre lo indica "la gran masa" aglutina a todos. No somos cuatro "raros" los que nos gustan otras cosas que no sean las luces de colores o el juego. Hay quien tiene la suerte de disfrutar una puesta de sol sobre el skyline de una ciudad y disfrutar del momento en que se sienta delante de una maquina tragaperras, insistiendo una y otra vez con sacarle dinero. O que le parece bien y estético esa réplica de la torre de Eiffel o del Coliseo romano de hormigón. Es sólo una cuestión de gustos y tan válido es uno como otro. No van a ser mejores ni peores unos que otros. Ni mas cultos o mas refinados.
Así que dicho esto puedo afirmar que la sensación que me produjo Las Vegas, lo mismo de día que de noche, fue de cutrés (algo barato y de mal gusto). Observar de cómo habían hecho toda la arquitectura y decoración de un lugar para promover el juego (los hoteles refrigerados en contraste del calor de la calle, los lobbys de los hoteles inundados de máquinas para jugar, comedores gigantescos con buffet para atender a miles de personas, edificios de mas de 30 plantas para albergar mas y mas huéspedes cuya principal atracción es jugar (no hay muchas otras allí). Todo esto quizá estúpidamente me deprimió. Observé una convención de sordomudos en mi hotel y vi cómo muchos de aquellos visitantes que había encontrado en la comida (los desayunos allí no van incluidos pues la gente se levanta tarde, sólo se incluye la comida) le veía sentados en las máquinas. Con sus señas alguna vez se comunicaban con el que tenían de la máquina de al lado. La concentración que mostraba sus caras en aquellas pantallas llenas de luces y colores que no exigían mayor habilidad que apretar un botón para finalmente obtener la respuesta de que no has ganado me hacía compadecerles inútilmente.
Una larga cola (en casi todos los sitios) para subir a las "góndolas" del canal de Venecia que han construido en The Venetian me hizo pensar de que era una atracción gratuita. Pues no, la gente hacía colas y pagaba porque una barca hiciera un recorrido en un canal artificial de 20 X 5 metros. Salía a la calle y el calor pronto me volvía a meter en otro hotel. En la puerta de éste otro, una chica rubia, americana, le decía a su pareja:
- Hazme una foto con la torre de Eiffel detrás...¿no es increíble tener la torre de Eiffel aquí ?
Yo miraba la réplica de la torre, pequeña para el original, por supuesto, y no la encontraba tan mal. Y hasta cierta ternura me despertaban sus palabras, reconociendo el símbolo de París en las Vegas. Lo mismo no podía decir de la fuente de Trevi. Cuando me acerqué sentí que aquel material era como el que se podía ver en las figuras que venden los chinos en las tiendas de todo a 100.
Y mucha mucha gente.
Entré en otro hotel. Me acerqué a una mesa con una chica que hacía de dealer y que vestía unas mallas ajustadas, mezcla de conejita de Playboy con mamachichos de Telecinco. Me detuve a observar el movimiento de sus manos. La rapidez con que los movía me fascinó...

- First time in Vegas? - me preguntó con una de esas sonrisas artificiales que te dicen que el cliente siempre tendrá la razón.
- Yep, dije yo
- Like it? Dijo ella esperando la usual respuesta de lo que suele ser la respuesta correcta.
- No - respondí casi secamente tratando de no perder cordialidad.

Su cara pasó a una expresión mas natural, aunque seria

- All the white trash of US come here (toda la basura blanca (literal) de los Estados Unidos viene aquí).- respondió ella

Me despedí brevemente casi con vergüenza, deprimido. Casi tan deprimido como Holden Caulfield perdido en las calles de NY. Me dije a mi mismo que yo era un imbécil elitista y un snob por responder algo que no estaba programado.
Al día siguiente di nuevamente un paseo por el recorrido hecho la noche anterior, acompañando un amigo que había venido de Chicago a reunirse conmigo. Mi impresión no cambió con aquella ecológicamente desastrosa ¿ciudad? (millones de metros cúbicos de aire refrigerado que salían expulsados como aire caliente en un sitio de por sí caliente.
La visita a una familia cubana que vivía y por tanto trabajaba en Las Vegas no hizo mas que acrecentar mi sensación.
La gente que trabaja allí, lógicamente no vive en esa calle de luces y hoteles. Por una autopista se llegan a los barrios llenos de casitas, algunas casi bonitas, otras no, sin ningún jardín ni verde posible.

- Aquí el agua es muy cara- me explicaron. Además ni regándolo es posible mantener esto verde.
La casa además del aire acondicionado tenía ventiladores encendidos. Sin llegar a tener calor, el aire era sofocante y la casa permanecía bastante en penumbras gracias a las cortinas - Para evitar el sol en los cristales.
Las tres generaciones de mujeres de la casa: la madre, la hija y la nieta, estaban sin trabajo.
- Aquí sólo existe el trabajo en los hoteles y en los casinos (en realidad todos los hoteles son casinos y los casinos hoteles).
- Ser dealer (o crupier) es el trabajo mejor pagado de aquí, lógicamente, pero a causa de la crisis han echado a muchos de ellos. Lo mas común es trabajar de mucama en uno de los hoteles o sirviendo en un restaurante.
Ahora esperan a que la cosa mejore y mas gente venga a jugar.

Quizá la explicación de que no me gustara esa ciudad radica en que yo no juego. Ni siquiera metí una moneda en una de esas máquinas, que siempre me han parecido que hacen demasiado ruido y me marean sus colores y luces. Quizá sea que no fui a uno de sus famosos espectáculos (Celine Dion, una de las mas "reputadas artistas" estaba de vacaciones, aunque confieso no poder escuchar mas de una o dos canciones de ella). Quizá el espectáculo del Circo del Sol (ese que puedo ver en Madrid, quizá por menos de 120 dólares que valía la entrada allí mas las copas). El único reclamo que me llamó la atención fue un gran cartel que anunciaba "Barry Manillow in Las Vegas". Salí corriendo espantado, imaginando esa versión norteamericana de Julio Iglesias, quizá ya en edad de la jubilación.
Ya a la entrada del hotel, a punto de montarme en el coche que nos llevaría al Cañón del Colorado admiré nuevamente las inmensas palmeras, que llegaban casi a la tercera parte del edificio de 36 pisos.
Son casi perfectas- pensé. Ni una rama seca, todas las puntas de las ramas afiladas. Me acerqué al tronco. Empecé a tratar de hundir la uña en él, y me ofrecía una resistencia rara, se hundía pero al mismo tiempo no lograba partirla.

- Son de plástico también- me dijo Rigo, ¿no te habías dado cuenta?

Me monté en el coche con un enorme suspiro.

Fotos de Las Vegas, Nevada, aquí

Curioso esto, publicado después que este post en El País. Ver aquí

Comentarios

ZoePé ha dicho que…
Yo que te iba a proponer que nos casemos en Vegas, :-)
He leído atentamente cada palabra. Intuyo que yo escribiría algo parecido que lo que he leído aquí.
Besos.
TORO SALVAJE ha dicho que…
Vamos hacia el plástico.
En todos los ámbitos.

Habrá que seguir huyendo.

Saludos.
Juncal ha dicho que…
No hubo romance, entonces.
Pero siempre te quedará París...

No se puede juzgar sin conocer y mira, eso que has ganado.

Un beso.

Pd
Por cierto de todo lo que he visto en las fotos hay un par de edificios (¿Hoteles supongo?)en la nº 17 creo, que son bastante bonitos. No sé si originales o copias, pero me llamaron la atención.
No me preguntes porqué.
Será que no conozco N.York ni paseo por La Castellana.
bambu222 ha dicho que…
Hola Alberto, lo bueno de estas ciudades temáticas es que concentran todo lo cutre dejando en paz a las demás ciudades que luchan por conservar todo su sabor.Por supuesto siempre nos quedará París,Lisboa, Berlín...y menos mal que luego partías al gran Canyon, el contrasre tuvo que ser alucinante.Besos.
Anónimo ha dicho que…
Estos Europeos! A mi me encanta Vegas, me gusta su falta de pretensiones artísticas aun cuando algunos de los mejores diseñadores del mundo han puesto algo allí (por ejemplo los interiores del Bellaggio), me gusta que van a la yugular del gusto medio y de ves en cuando llegan mas lejos, la limpieza, las cosas enormes, la comida, los espectáculos (no se si Love lo ponen en Madrid, en Miami no), la ausencia de policías visibles, el orden, la convivencia de los pecadillos con los pecados mas enormes ect
Me gusta que hicieron una playa con olas, los resultados de estudio de sonido, que no este Calatrava sino Buttler, que la ciudad en general fue un logro impresionante de la gente (mafiosos) que construyo eso en el desierto ect Tanto el Partenón como Guggegein de Bilbao son producto de la vanidad con un poco mas o menos de barniz histórico no? El cañón del colorado seria algo presuntuoso si no fuera natural digo yo
Pero respeto tu Europea y elitista opinion y agradezco humildemente tu post tan bien hecho... Dos abrazos
Juncal ha dicho que…
Jiiii

La guerra de los mundos.

;-)
Alberto ha dicho que…
Sinplan anónimo :-)
Me ha encantado tu respuesta ¿era una respuesta? o mas bien tu comentario. Aun dándote el beneficio de la duda por las tantas cosas que no conozco documentalmente de las Vegas y que sin duda tu sabes mejor que yo, en cuanto a afamados diseñadores o arquitectos (Juncal coincido con esos hoteles, me gustan esos edificios), las Vegas sigue siendo para mi un sitio inexplicablemente cutre. Lastima de desierto...(una butarde)...
Pero te prometo que la próxima vez que la vea (en fotos) la trataré de ver con otros ojos...
Gracias por esas risas que me he echado con este post.
Mas abrazos (a eso no me ganas :-))
Alberto ha dicho que…
"Partenón como Guggegein de Bilbao son producto de la vanidad con un poco mas o menos de barniz histórico no? El cañón del colorado seria algo presuntuoso si no fuera natural digo yo"

Muy bueno titi, me parto de la risa y ademas me hubiese encantado escribir eso yo :-)
Juncal ha dicho que…
Mira... que Dios castiga sin piedra ni palo.
¿Qué nos apostamos a que de aquí a unos años construyen una sala de fiestas Copy-Guggenheim ?

Por cierto, que su arquitecto ...
¿de dónde era?
Mmmm, de Bilbao no, desde luego. (Muy a pesar de los bilbáinos, oye) Cachis...

Besos
Nacho ha dicho que…
No se si viene al caso...pero lo digo.

Cuando trabajaba en el estanco y alguien me pedia el mejor cigarro que tuviera para regalar a un conocido, yo les preguntaba si ese señor fumaba puros y si sabian cuales eran, mas que nada para darme una idea de que era lo que tenia que ofrecerles para que quedaran bien.
Ellos me decian que no importaba que les diera el mas caro que sesguro era el mejor...
Yo les respondia que el mejor no era el mas caro sino aquel cigarro que a el le gustaba.

Si a mi me gusta un Padrón y lo considero el mejor cigarro del mundo...por mucho que me ofrezcas un Cohiba (considerados los mejores cigarros del mundo)seguire prefiriendo un Padron, para mi el mas rico.

Para gustos se hicieron colores y para jardines...las flores.

¿Mi opinion personal?
Sigo prefiriendo la Habana con toda su decadencia a N.Y. o Vegas.
Como dice Serrat prefiero un buen polvo a un rapapolvo...

Abrazos
Alberto ha dicho que…
Curioso esto, publicado después que este post en El País. Ver aquí
Alís ha dicho que…
Me temo que mi impresión no sería muy diferente a la tuya.
Interesante post y comentarios

Un beso
Fa ha dicho que…
Me gustaría leer una crítica sobre las Vegas dentro de mil años (los que separan al Partenon del Guggenheim, año arriba año abajo), pero me temo que no podrá ser.

"Estrellita" se casó en Las Vegas ... tiene todos los puntos, lo sé... :). Su visión era muy diferente de la tuya (y es europeo tb). Igual a Belén Esteban también le fascinaría un hotel con aire enriquecido y tantos neones en la calle. Lo mejor de todo es haber ido, así uno puede hablar. Yo mejor me callo

Besicos, Al

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