A veces


A veces soy ese moro que cruza la calle, da igual marroquí o tunecino. A veces soy yo que no cree en el Corán ni en la Biblia, pero que cada sábado va a la mezquita a encontrar algún igual con quien hablar.
A veces soy esa gallega recién llegada de un pueblo de Lugo, que no disimula su acento, que aún no comprende esta ciudad, tan pueblerina a veces y tan cruel casi siempre. A veces huyo de esas imágenes del maltrato y sigo viendo los torpes hombres de la aldea vestidos de chaqueta y corbata. Veo en sus rostros el desprecio a todos y especialmente a todas.
A veces logro se ese rubio de Europa del este. Que se afana por conseguir el dinero. A quien si hay trabajo en la construcción le encontrarás allí y si no, estará rondando alguna urbanización para ver que encuentra: una bicicleta abandonada, un chándal de marca en una tendedera.
A veces soy ese mileurista, a quien sus padres aún le ayudan para poder vivir en un piso compartido. A veces soy el mas entusiasmado y otras no tanto, como cuando estoy dispuesto a dejarme humillar para lograr ese puesto en la empresa.
A veces soy ese travesti, que cada noche corre detrás de los coches en la Casa de Campo. Quien malamente se puede lavar después de un servicio completo y que apenas puede pagar el crédito de la operación de las tetas.
A veces soy esa madre soltera, que aún se pregunta si habrá vida para ella detrás del cuidado de su hijo y el pago de la hipoteca. La que se pregunta si alguna vez encontrará un hombre que la merezca o si merecerá alguien que le haga sentir que es mas que una mujer madre.
A veces soy ese tío de cuarentitantos, soltero y con un abono al fútbol; que huye de cada relación que cree que le encadenará y prefiere el sexo con las chicas de pago o esas que de borrachas en una noche no saben ni con quien se acuestan. Ése que aún no comprende de qué va el vivir y le cuesta pensar que signifique mucho mas que unas cervezas con los amigos.
A veces soy el padre de familia, de un matrimonio de 10 años en el cual el sexo acabó y sólo quedan los abrazos y los te quieros, mientras algo se rebela en él en busca del calor de una entrepierna. Pero se aguanta y suspira, ve a sus dos hijas y a su mujer y se siente culpable.
A veces soy ... soy muchos a veces
Si es tan fácil es comprender lo que son muchos a veces... ¿por qué a veces es tan difícil comprenderse a sí mismo?



Caravan Palace

Comentarios

Nacho ha dicho que…
Quizás, a veces deberías tener un poco de menos de empatía y ser, a veces, más individualista, menos solidario, quizás, a veces, pero solo a veces, pensar un poco más en tí.

Abrazos.
TORO SALVAJE ha dicho que…
Yo no lo sé.
Lo que si voy vislumbrando es que puede que no tengamos que ser tan exigentes con nosotros mismos y aceptarnos más.

Saludos.
Sinplan ha dicho que…
Yo tampoco se
Conozco gente que parece en control, como que saben bien quienes son, pero creo que no les importan los demas
Valdra la pena? Un abrazo dubitativo
Alberto ha dicho que…
si, la verdad es que de vez en cuando somos algunos personajes diferentes... supongo que los que nos llaman la atención.
Pero nunca dejamos de ser nosotros mismos.
Muy bien descritos todos los personajes..
Un abrazo
bambu222 ha dicho que…
Muy obervador si que eres siempre,no dejes de pensar en tí pero me gusta esa capacidad de ponerte en el lugar del otro.Abrazo.
JOAKO ha dicho que…
A veces (siempre) es la única manera de comprender el mundo.
Esta noche le prepararé algo especial a mi mujer...

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